Programa desarrollado para el sector oleícola ha permitido apoyar a los agricultores en la mejora tecnológica del proceso productivo, convirtiendo el aceite local en un referente de calidad, rescatando así...
Programa desarrollado para el sector oleícola ha permitido apoyar a los agricultores en la mejora tecnológica del proceso productivo, convirtiendo el aceite local en un referente de calidad, rescatando así las tradiciones locales a través del uso de la variedad sevillana (Mundo Agropecuario).
Tras años de trabajo en la Región de Atacama finalizan proyectos financiados por el Fondo de Innovación para la Competitividad del Gobierno Regional y ejecutados por el Instituto de Investigaciones Agropecuarias INIA Intihuasi del Ministerio de Agricultura. Una jornada de cierre que contó con la participación de agricultores quienes conocieron los resultados del trabajo realizado en el proyecto “Aplicación de sistemas de detección temprana y control de bajo impacto ambiental de plagas y enfermedades en cultivos de hortalizas para la obtención de productos saludables” como también los resultados presentados del proyecto “Programa de innovación en el modelo de negocios del sector oleícola del Huasco; foco sello de origen, denominación de origen”.
El Seremi de Agricultura Patricio Araya destacó la importancia de la Denominación de Origen para los agricultores del Valle “va a permitir que los agricultores se puedan certificar año a año, pasando por un control de calidad y trazabilidad, se ha estado entregando la información a todos los agricultores para que conozcan cuáles son los beneficios de la Denominación de Origen”.
Gabriel Castillo, productor de aceitunas y aceite de oliva extra virgen de Alma del Huasco, destacó la importancia que tiene para los agricultores el desarrollo de los programas ejecutados por INIA “es importante porque tengo la asesoría del INIA, nosotros necesitamos de ellos porque tienen la última palabra en cómo hacer los manejos, especialmente con la denominación de origen, la asesoría esta 100% van a mi parcela y me van diciendo qué tengo que hacer y cómo mejorar”.
El programa desarrollado para el sector oleícola ha permitido apoyar a los agricultores en la mejora tecnológica del proceso productivo, convirtiendo el aceite local en un referente de calidad, rescatando así las tradiciones locales a través del uso de la variedad sevillana, la que se utiliza en pocas zonas del mundo permitido entregar desde del Huasco un aceite de calidad, con características únicas y de gran sabor para el consumidor.
El Consejero Regional Juan Santana agregó “yo creo que es muy oportuno y valioso tratar de acercarse a la actividad agrícola y hacer todo lo posible para que se avance en todos aquellos aspectos que involucra la actividad agrícola, entonces siempre hay muy buena disposición. Somos conscientes de la importancia que tiene la agricultura en nuestro valle”.
Por otro lado, el trabajo realizado con los hortaliceros de la zona permitió entregar un impacto positivo al medio ambiente, generando una rentabilidad en el cultivo, aportando beneficios directos para la salud de los trabajadores y consumidores, gracias a la gran disminución de aplicación de insecticidas que se logró durante el periodo del cultivo fue de la mano de un cambio cultural de los agricultores en su metodología de producción tradicional.
“El Ministerio de Agricultura a través del INIA tiene grandes desafíos para la Región de Atacama, en la Provincia del Huasco seguiremos trabajando en el apoyo con el principal cultivo que es la olivicultora, pero también buscando la forma de diversificar los cultivos que están presentes en esta zona, brindando asesoría técnica y el acompañamiento tecnológico, para que los cultivos del presente y del futuro puedan tener un rendimiento adecuado y se pueda transformar en beneficio para los propios productores”, sostuvo el Director Regional de INIA Intihuasi Edgardo Díaz.
La jornada contó con la exposición de la investigadora de INIA Intihuasi Verónica Arancibia quien lideró el proyecto para el sector oleícola y también con el Doctor en Entomología Claudio Salas, investigador de INIA Intihuasi y encargado del proyecto con enfoque hortícola, además durante la actividad de cierre se contó con la presencia de la Doctora en Bioquímica Flora Pancetti de la Universidad Católica del Norte, quien dictó una catedra sobre la exposición ambiental y ocupacional a plaguicidas.