Productores afirmaron que el ajuste no sorprende, por el alto volumen adquirido al extranjero el ejercicio pasado. (Mundo Agropecuario). Una de las principales inquietudes de los productores locales de leche...

Productores afirmaron que el ajuste no sorprende, por el alto volumen adquirido al extranjero el ejercicio pasado. (Mundo Agropecuario).

Una de las principales inquietudes de los productores locales de leche es el constante aumento de las importaciones por parte de la industria. Según datos de la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (Odepa), el año pasado se compró al exterior 27.043 toneladas de leche en polvo, en sus variedades entera y descremada, con un alza de 48,9% en comparación a 2016.

Sin embargo, en el período enero-abril de este año, las internaciones de este producto cayeron. En ese lapso, las importaciones de leche en polvo acumulan 8.286 toneladas, con una baja de 13,9% anual. A su vez, el valor de las internaciones, medido en dólares por toneladas, ha disminuido 4,5% en 2018.

Entre los países que han visto mermados sus embarques hacia Chile figuran Nueva Zelandia, que el año pasado fue el principal proveedor del mercado local, con una caída de 56,8%. Uruguay y la Unión Europea también han tenido un fuerte descenso, de 58,9% y 91,2%, respectivamente. Argentina estaría supliendo esos menores envíos, con lo cual ya se ha posicionado como el segundo mayor vendedor de leche en polvo hacia Chile, con un alza de 252,4% anual enero-abril.

Considerando dicha baja en las importaciones, ¿es posible hablar de un cambio de tendencia? Para el presidente de la Federación de Productores de Leche (Fedeleche), Rodrigo Lavín, este ajuste no sorprende, debido al gran volumen que se importó en 2017. «En el caso de la leche en polvo entera, si bien se registra una caída este año, las importaciones de 2018 son alrededor de cuatro veces mayores respecto de la cantidad que se importó en 2014, en 2015 e, incluso, en 2016. Por ende, siguen siendo niveles sumamente altos», sostuvo.

Lavín manifestó que le inquieta que la recepción de leche por parte de las plantas siga bajando. «Acumulamos tres años negativos. Y este cuarto año muestra una reducción de la recepción de leche de 2,8% durante el primer trimestre, lo que resulta extremadamente alarmante», advirtió.

Otro de los aspectos que llaman la atención en lo que va del año son las fuertes variaciones de la recepción de leche a nivel de regiones. En la región Metropolitana ha aumentado 39,2%, mientras que en el Biobío ha caído 36,5%. El director de la Sociedad Agrícola y Ganadera de Osorno (SAGO), Harold Brethauer, indicó que «Soprole cerró su planta en el Biobío, por lo que toda la leche que se compra en esa región se recepciona en Santiago. Eso explica dichas alza y baja».

En La Araucanía ha tenido un alza de 9,3%, Los Ríos casi no muestra variaciones y en Los Lagos ha disminuido 5,1%.