El programa, de casi 2 años y medio de duración, estuvo a cargo de la Comisión Nacional de Riego del Ministerio de Agricultura y fue ejecutado por la UNAP (Mundo...
El programa, de casi 2 años y medio de duración, estuvo a cargo de la Comisión Nacional de Riego del Ministerio de Agricultura y fue ejecutado por la UNAP (Mundo Agropecuario).
Mejorar las prácticas de riego de los agricultores del Valle de Lluta fue el objetivo del programa “Transferencia Tecnológica para Mejorar la Eficiencia de Riego en el Río Lluta”, iniciativa impulsada por la Comisión Nacional de Riego (CNR) y que esta semana tuvo su cierre en la Universidad Arturo Prat (UNAP).
Este programa estuvo ejecutado por la UNAP y fue de especial importancia para los casi 200 agricultores que fueron parte de él, dada la próxima entrada en operación del embalse Chironta y la clara necesidad de que los agricultores aprovechen de buena manera esta obra.
El Seremi de Agricultura de la Región de Arica y Parinacota, Jorge Heiden, manifestó que estas capacitaciones “están en la línea de trabajo de nuestro Presidente Sebastián Piñera, que apunta directamente a mejorar la calidad de vida de todos los chilenos”.
Por su parte, el Coordinador Zonal Norte Grande de la CNR, Marcelo Díaz, explicó que “se consideró que los agricultores lluteños deben estar preparados técnicamente para mejorar las eficiencias de sus riegos y prácticas productivas, además de prepararlos para potenciales nuevos cultivos, que podrán ser implementados en territorio cuando el embalse se encuentre operativo y los agricultores dispongan de mayor cantidad y calidad de aguas”.
Durante el desarrollo del programa se otorgó apoyo legal a los tenedores de derechos de aprovechamiento de aguas, para dar certeza jurídica, lo cual es fundamental para un desarrollo integral del riego.
Además, se realizó un catastro territorial referente a la superficie bajo riego, cultivos y sistemas de riego en el valle, dos cursos de capacitación sobre eficiencia de riego intrapredial, demanda hídrica y alternativas tecnológicas y productivas, un curso de formación de celadores, se implementó una unidad demostrativa de riego y se regularizó 200 derechos de aprovechamiento de aguas.
Finalizando la actividad, tomó la palabra María Marín, agricultora del valle, quien expresó con mucha alegría su agradecimiento por haber formado parte de este programa “el que me abrió la mente y fue una tremenda oportunidad de aprender con profesores de la mejor calidad”.
