Chile proyecta un récord en exportación de carozos con crecimiento en calidad y nuevos mercados en la temporada 2024-2025.
El gremio Frutas de Chile proyecta una temporada de exportación de carozos sin precedentes para el período 2024-2025, con un aumento estimado de 4% en comparación con la temporada anterior. Se espera que la exportación de productos como ciruelas japonesas y europeas, duraznos y nectarines alcance un volumen cercano a las 38 millones de cajas.
El valor de las exportaciones también experimentará un crecimiento importante, superando los 540 millones de dólares, lo que representaría un aumento equivalente al crecimiento proyectado en el volumen de envíos. Aunque se prevé este incremento, factores como el destino de los envíos y las fluctuaciones en los precios de los fletes marítimos podrían influir en las cifras finales.
Volumen, pero también calidad
Ignacio Caballero, director ejecutivo del Comité de Carozos de Frutas de Chile, comentó que “esta estimación, aunque aún preliminar, refleja que el sector está enfocado no solo en aumentar los volúmenes, sino también en mejorar la calidad de la fruta. Nuestro objetivo es incentivar un mayor consumo y obtener mejores retornos, lo que nos hace anticipar un nuevo récord exportador para los carozos”.
Según explicó Caballero, el aumento proyectado “está alineado con la estrategia del Comité, que busca aprovechar las oportunidades de los diferentes mercados internacionales, además de Asia, para seguir creciendo con un enfoque en la calidad y la consistencia de la fruta exportada”.
El Comité de Carozos también recordó que, durante la temporada pasada, China fue el principal destino para las exportaciones de ciruelas y nectarines chilenos, concentrando el 55% y 63% de los envíos de cada producto, respectivamente. En cuanto a los duraznos, el mercado de Norteamérica, compuesto por Estados Unidos y Canadá, representó el 50% de las exportaciones.
De cara a la nueva temporada, el gremio se enfocará en ampliar su presencia en mercados como México y Brasil, países con un gran consumo de frutas, pero en los que Chile aún no ha logrado penetrar de manera significativa. Para este propósito, el Comité de Carozos está desarrollando campañas de comunicación orientadas a resaltar las ventajas de las variedades chilenas.
Proyección por categoría de producto
De acuerdo con las estimaciones de Frutas de Chile, los nectarines serán los grandes protagonistas de la temporada 2024-2025, con un aumento proyectado del 22% respecto al año anterior. Se espera que el volumen de exportación llegue a 14,1 millones de cajas de 8 kilos cada una. Con este crecimiento, los nectarines se convertirían, por primera vez, en la principal especie exportada dentro del grupo de los carozos. Caballero detalló que de este total, aproximadamente 9 millones de cajas serían de nectarines de pulpa blanca (63%), y 5,2 millones de cajas de pulpa amarilla (37%).
En términos de volumen, las ciruelas japonesas ocupan el segundo lugar en las proyecciones de exportación, con un estimado de 13,5 millones de cajas de 7 kilogramos cada una. Sin embargo, se anticipa una caída del 4% en comparación con la temporada pasada. De esta cantidad, el 58% corresponde a variedades rojas, el 40% a variedades negras, y el 1% restante a otras variedades.
Estándares
También se espera una disminución en las exportaciones de ciruelas europeas, con una caída estimada del 7% respecto al récord histórico alcanzado en la temporada anterior, que superó las 8 millones de cajas. Ante esta situación, el Comité de Carozos se encuentra trabajando para mejorar la calidad de la fruta exportada, implementando recomendaciones y estrategias educativas que promuevan el cumplimiento de estándares mínimos. “Es fundamental entender que la fruta de baja calidad puede dañar la imagen del mercado. Por eso, las expectativas son que las cifras aumenten a largo plazo”, concluyó Caballero.
Por último, se proyecta un ligero aumento del 4% en las exportaciones de duraznos, que llegarían a 2,9 millones de cajas de 8 kilos cada una. Este repunte se da después de dos temporadas consecutivas de declive.
Caballero explicó que el incremento de volumen en algunas especies se debe a la entrada en producción de nuevas plantaciones comerciales. En cambio, las disminuciones están asociadas al proceso de recambio varietal, con la incorporación de nuevas variedades que prometen una mejor calidad en sabor y resistencia para el transporte.