Sin duda la pandemia afectó mucho a nuestra pequeña agricultura, sobre todo en el primer año donde las restricciones de movilidad por las extensas cuarentenas, el poco acceso a insumos y la baja en la ventas.
“Dejamos una institución moderna, ordenada y con mayor acceso a tecnologías e información”.
El director regional de INDAP abordó los diferentes ejes productivos que se potenciaron durante su administración, así como los principales hitos realizados en un período especialmente marcado por la Pandemia donde diversas estrategias de desarrollo se ejecutaron para apoyar a la Agricultura Familiar Campesina en el territorio.
¿Cuáles fueron algunas de las estrategias que se hicieron para modernizar el INDAP?
– Para que INDAP pueda entregar un mejor servicio a sus agricultores se hizo necesario estructurar muy bien los principales programas que tiene nuestra institución de acuerdo a los perfiles de los usuarios, categorizándolos en productores de autoconsumo y productores articulados al mercado.
Para ello nos enfocamos en describir muy bien la categoría del usuario, de esta forma, agricultores que se encuentran vinculados al mercado pudieron migrar desde Prodesal( Programa de Acción Local) a SAT (Servicio de Asesoría Técnica) obteniendo con ello un mayor número de herramientas para fortalecer el sentido comercial y de negocios de la actividad en sus distintos rubros con acceso a más crédito y financiamiento.
Así, ambos programas cumplen de mejor forma sus propósitos: el pequeño agricultor del nivel de autoconsumo, y que exhibe mayor grado de vulnerabilidad social, accede a apoyos más pertinentes y oportunos que le permiten mejorar su calidad de vida y la de sus familias. A su vez, aquel productor que ha consolidado sus procesos productivos puede optar a más capacitaciones y créditos que le permiten avanzar aún más en sus procesos productivos.
¿Cómo afecto la pandemia al trabajo de los usuarios de INDAP?
-Sin duda la pandemia afectó mucho a nuestra pequeña agricultura, sobre todo en el primer año donde las restricciones de movilidad por las extensas cuarentenas, el poco acceso a insumos y la baja en la ventas de productos hicieron muy difícil el trabajo en el campo. Rubros y servicios como el Turismo Rural fueron uno de los más afectados por esta crisis sanitaria que mantuvo en confinamiento a gran parte de la población. Aun así, y con todas estas dificultades el campo nunca paró de producir, de alimentar a la población y eso siempre se agradece .En este sentido como INDAP nos preocupamos de que nuestros usuarios pudieran desplazarse para realizar sus labores agrícolas con normalidad en zonas en cuarentena.
Era fundamental entregar a nuestros agricultores y agricultoras estas facilidades de desplazamiento para el desarrollo de sus actividades ya que son y serán siempre primordiales para la sustentabilidad alimentaria de la población en el territorio. Por eso también el acceso a crédito a tasas muy bajas, la renegociación de pagos, la entrega de bonos y el incentivo a trabajar cooperados, fueron claves para mantener a flote todo el esfuerzo de nuestros pequeños agricultores.
En ese sentido. ¿Qué avances se hicieron para potenciar la comercialización?
– En directa relación con lo anterior, una parte importante de la cadena productiva es el fortalecimiento de la comercialización. Es por eso que fue muy importante mejorar las herramientas de gestión, trabajando y definiendo modelos de negocio para los agricultores en los programas SAT, pero también entregando oportunidades operativas reales como la creación de más de 18 Mercados Campesinos en la región, para que agricultores puedan vender directamente sus excedentes al consumidor final, fortaleciendo así un importante punto de venta.
Pero no solo eso, en la región potenciamos con mucha fuerza los mercados campesinos on line, por lo que creamos una página web llamada www.mercadoscampesinos.cl que hoy alberga cerca de 1000 agricultores en rubros como producción de frutas, hortalizas, procesados, artesanía y turismo rural, entre otros.
Una página que se destaca porque cada agricultor se encuentra georreferenciado, lo que permite que consumidores puedan llegar fácilmente hasta el punto de venta en el campo, favoreciendo el consumo de productos frescos, sin intermediarios, en la que se genera un vínculo entre el agricultor y la familia que prefiere comprar directamente a nuestros productores. Eso fideliza también la relación agricultor-cliente y permite la venta en circuitos cortos de comercialización.
¿Cómo funciona el nuevo sistema de licitación y banco de proyectos de INDAP?
– Este nuevo sistema busca facilitar el acceso de los agricultores a más y mejores proyectos de riego, en la que se abre la posibilidad que más consultores puedan participar en la elaboración del proyecto y la ejecución del mismo. De esta manera, INDAP avanza en una propuesta que considera regular, por medio de la Ley de Compras Públicas, la licitación pública de los proyectos de riego que financia, buscando que este proceso sea más transparente y competitivo. La demanda inicial de los proyectos de riego requerida será levantada por los equipos técnicos de INDAP que asesoran a los productores, generándose así un “banco de proyectos” dependiente del INDAP y no de consultores externos. En esta discusión también se consideró como un elemento relevante la crisis climática y sus efectos que, entre otras variables, muestran un comportamiento atípico de las estaciones del año.
En el contexto del cambio climático. ¿Qué avances se hicieron para asegurar el suministro de agua?
– Sin duda el cambio climático y como consecuencia el déficit hídrico es una realidad permanente que nos está golpeando más fuerte en estos últimos años, por lo que debemos estar preparados. Para ello, el Gobierno del presidente Piñera dispuso un mayor prepuesto de riego para INDAP en la región, aumentando de 1.100 millones a más de 2.500 millones este año 2022.
En esta administración se realizaron más de 300 proyectos de riego individual y más de 30 proyectos de riego asociativo solo en la Región de Los Lagos beneficiando más de 600 agricultores. Dentro de esto proyectos se encuentra la construcción de pozos profundos con paneles fotovoltaicos, de riego gravitacional y la implementación de recolectores de aguas lluvia, entre otras iniciativas.
¿Cómo fue el trabajo con el Gobierno Regional para financiar y desarrollar proyectos?
– Los consejeros regionales, junto a los intendentes de la época fueron un gran apoyo para el desarrollo de proyectos con sello regional, ya que realizaron una importante inversión en tecnificar la pequeña agricultura, con proyectos para maquinaria y equipamiento para mujeres; un inédito programa de fertilización de suelos indígenas en Chiloé y el apoyo al Sitio y Sello SIPAM Chiloé. Así, en toda nuestra administración, entre proyectos apalancados y ejecutados, se invirtieron más de 5.000 millones de pesos en la Región de Los Lagos.
¿Cuál fue el sello de la administración de INDAP en la Región?
– Creo que dejamos una institución moderna, ordenada y con mayor acceso a tecnologías e información. Eso ha sido clave en los últimos años sobre todo en Pandemia donde el acceso a los mercados, las ventas online y el acceso a la información y a la capacitación ha sido remota y probablemente será la tónica en el futuro.
El acceso a herramientas tecnológicas fue también un gran avance y un sello que INDAP realizó durante esta administración. Por eso fomentamos el financiamiento crediticio para la adquisición de herramientas tecnológicas, como computadores, impresoras, celulares y paquetes de internet como una forma de apoyar el trabajo productivo de la pequeña agricultura en forma remota, accediendo de mejor manera a los mercados.
Ya lo hablamos anteriormente, pero sin duda uno de los sellos de esta administración ha sido el mejorar y facilitar el acceso al recurso hídrico, con más y mejores inversiones.
Se potenció igualmente el trabajo con mujeres y jóvenes implementando programas especiales para estos segmentos, fomentando el trabajo asociado para lograr mayores objetivos en común.
También logramos mejorar el Programa de Asociatividad Económica (PAE) como un instrumento de fomento, que entrega incentivos económicos no reembolsables a empresas asociativas campesinas para cofinanciar servicios en el ámbito de la gestión empresarial, desarrollo organizacional y asesoría técnica. Todo esto junto con un programa de gestión comercial especializado que ha potenciado rubros claves en la región como la producción ganadera y hortícola.