Los primeros siete productores ya lo pueden utilizar tras haberse certificado en requisitos en bienestar animal, medio ambiente y seguridad alimentaria.
Siete productores asociados a Chilehuevos ya pueden utilizar el sello de calidad creado por el gremio tras certificarse en los tres pilares del programa -bienestar animal, protección del medio ambiente y seguridad alimentaria- que elaboró el gremio.
Las empresas autorizadas son Avícola Santa Elvira, Agrícola Santa Marta de Liray, Huevos Coliumo, Huevos de Talca, Avícola Andina, Avícola Valle Central y Avícola y Comercial El Toco. Estos productores pueden usar el sello en sus huevos, envases y comunicación con sus clientes, medios de transporte, entre otros.
“Los asociados que aún no cuenten con certificación puedan solicitar ser auditados para optar a certificación en el (los) pilar(es) que les falte(n), pudiendo así acceder también al uso del sello. Los no asociados que se interesen también pueden acceder en la medida que se acredite el cumplimiento de sus requisitos y cancelen el costo asociado a su membresía al programa”, detalla Patricio Kurte, gerente general de Chilehuevos.
La implementación del sello responde a lo establecido en el Código de Ética gremial donde los asociados se comprometen a desarrollar sus actividades productivas en el marco de la Política de Sostenibilidad en lo que respecta al bienestar de las aves ponedoras, entorno seguro y saludable para sus trabajadores y trabajadoras, seguridad en la producción de huevos y cuidado del medio ambiente.
“El objetivo final es obtener huevos de alto estándar, producidos gracias a animales sanos, en sistemas de producción sostenibles que cuidan a los consumidores, los trabajadores del sector, el medio ambiente y a las comunidades locales a los planteles productivos”, añade Patricio Kurte.
El sello de calidad de Chilehuevos -que consta de un conjunto de prácticas de gestión en cada uno de sus pilares- es parte de las iniciativas del sector productor de huevos provenientes de sus dos Acuerdos de Producción Limpia (APL) y la Guía de Buenas Prácticas de Bienestar Animal (elaborado por el SAG, Chilehuevos, académicos y organizaciones no gubernamentales especializadas en bienestar animal); así como los prerrequisitos del Sistema de Análisis de Peligros y Puntos Críticos de Control (HACCP) en Establecimientos de Alimentos.