El convenio de colaboración significó una inyección de recursos de 50 millones de pesos, cuyo objetivo es desarrollar un manejo adecuado del agua a través del empleo eficiente del riego...
El convenio de colaboración significó una inyección de recursos de 50 millones de pesos, cuyo objetivo es desarrollar un manejo adecuado del agua a través del empleo eficiente del riego intrapredial (Mundo Agropecuario).
Al menos cien hectáreas de bofedales de la comuna de General Lagos, comenzaron a recibir una atención integral, privilegiando además la contratación de mano de obra local, gracias al convenio CONAF-CONADI, y la ampliación del proyecto Manejo sustentable de la tierra.
La iniciativa, según resaltó el director de CONAF Arica y Parinacota, Héctor Peñaranda, “es también fruto de la demanda de la dirigencia de las Áreas de Desarrollo Indígena (ADI), a la que estamos dando una respuesta concreta mediante este trabajo”.
Peñaranda indicó que “una de las inquietudes de los dirigentes ha sido mantener o atraer a los jóvenes que están migrando desde la comuna, y en este sentido las cuadrillas contratada a la fecha tienen entre sus integrantes a jóvenes de entre 20 y 30 años.
El convenio de colaboración entre CONAF y CONADI significó una inyección de recursos de 50 millones de pesos, con el objetivo de desarrollar un manejo adecuado del agua a través del empleo eficiente del riego intrapredial para lograr un manejo sustentable e integral de los bofedales y humedales altoandinos. Esta meta implica asimismo sumar acciones de conservación, con lo cual se abordan temas productivos y de resguardo de la biodiversidad local.
En este contexto, el seremi de Agricultura, Jorge Heiden comentó que “nuestro altiplano es frágil respecto de sus recursos, de allí que como Ministerio y como gobierno se ha tomado en cuenta esta realidad bajo los enfoques planteados en la Estrategia de cambio climático y recursos vegetacionales, cuyo fin es precisamente disminuir esa vulnerabilidad y aumentar la resiliencia de estos ecosistemas. Por ese motivo es que estamos trabajando en forma enlazada con todos los servicios del agro en nuestra región”.
Roberto Tancara y Horacio García, encargados de CONAF del proyecto Manejo sustentable de la tierra y convenio CONAF-CONADI, respectivamente, explican que el acuerdo alude también al uso de tecnologías y métodos de riego tradicionales y ancestrales. “En este sentido utilizamos diferentes técnicas, tales como drenaje de los apozamientos de agua, limpieza de material vegetal muerto, champeo y rechampeo (sacar y replantar especies del bofedal) y el reaprovechamiento de canalizaciones comunitarias. Esto representa recuperar canales abandonados por años por diversas causas, en especial la escasa fuerza de trabajo”.
Otro aspecto que destaca por su parte el director de CONAF, quien recorrió durante la semana los lugares donde se desarrollan los trabajos, es que “esta alianza ha permitido atender tanto los sectores línea, centro y carretera de General Lagos, y próximamente estaremos también abordando algunos predios altiplánicos de la comuna de Camarones”.
Cifras
Los bofedales de General Lagos tienen una importancia crucial en la actividad ganadera de la comuna. El trabajo de CONAF contabiliza a la fecha una proyección de trabajos en 23 bofedales, lo que en términos humanos beneficiaría al menos a 15 familias y a ocho comunidades indígenas que agrupan a varios núcleos familiares.
¿Y qué significa mantener y recuperar un bofedal? Roberto Tancara responde que para toda la comuna tiene el sentido mayor de asegurar vegetación nueva, que sirva como forraje para sus llamas y alpacas. Y en términos de la biodiversidad, permite mejorar un hábitat importante para la fauna silvestre, lo que incluye vicuñas, aves y hasta roedores. A la vez contribuye a aumentar la diversidad vegetacional, ya que un bofedal puede llegar a contener más de 35 especies”.
“Otra de las bondades de estas formaciones –quizá una de las más importantes- es la retención hídrica ya que evitan o inhiben la evapotranspiración”, explica Horacio García.
El trabajo de CONAF en torno a los bofedales, así como en materia de restauración de los bosques de queñoas –que en General Lagos alcanzan 20.836 hectáreas de Polylepis tarapacana-, representa uno de los aportes principales a la agenda de acciones en torno al cambio climático a nivel regional.