La idea de la Cocina Casablanca surgió ante las dificultades de los agricultores para obtener la resolución sanitaria en sus predios y la demora de este trámite. (Mundo Agropecuario). En...
La idea de la Cocina Casablanca surgió ante las dificultades de los agricultores para obtener la resolución sanitaria en sus predios y la demora de este trámite. (Mundo Agropecuario).
En todo un éxito se ha convertido la Cocina Casablanca, un innovador proyecto impulsado por el municipio de esa comuna de la Región de Valparaíso en conjunto con el Programa de Desarrollo Local (Prodesal) de Indap, que ha permitido que 25 pequeños productores agrícolas, en su mayoría mujeres, elaboren en conjunto conservas, jugos y hierbas deshidratadas en dos containers que fueron adaptados como sala de procesos.
La iniciativa productiva, pionera en su tipo en la región, lleva un año y medio de funcionamiento y ha brindado asesoría técnica a los emprendedores rurales de Casablanca para que, en forma comunitaria, lleven adelante sus proyectos sin necesidad de esperar la resolución sanitaria, ya que los contenedores cuentan con la implementación y estándares que exige la autoridad.
La idea de la Cocina Casablanca, según dijo Ariel Vilches, coordinador del programa Prodesal de Casablanca, surgió ante las dificultades de los agricultores para obtener la resolución sanitaria en sus predios y la demora de este trámite. “Fue entonces que se planteó la posibilidad de hacer una sala de procesos con resolución sanitaria para que la ocuparan los usuarios y así pudieran salir al mercado formal con sus productos etiquetados y autorizados”.
Añadió que el proyecto partió en forma gradual y con un proceso de capacitación, donde colaboró la Escuela de Alimentos de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso. Hoy los 25 agricultores ocupan los containers por turnos a través de una agenda que se va programando de acuerdo a sus propios requerimientos.
El éxito de la Cocina Casablanca ha quedado demostrado en que ya se producen más de 20 tipos de mermeladas, conservas de frutas y hortalizas como topinambur, jugos artesanales, infusiones, té de hierbas medicinales y hongos shiitake deshidratados, entre otros procesados.
“A nosotras nos cambió la vida. Primero hicimos los cursos que se requerían y luego nos asociamos y formamos la agrupación Melodías del Valle de Casablanca, para producir infusiones artesanales. Ahora tenemos 11 variedades, entre las que destacan las de caléndula, té verde con piña, cedrón con naranja, menta con paico, tilo y una que llamamos invierno feliz, con hierbas y hojas para el resfrío como las de eucaliptus. Los resultados han sido excelentes”, dice la emprendedora Lastenia Salazar.
Otra de las integrantes de Cocina Casablanca es María Luisa León, quien se dedica a la producción de mermeladas: “Las produzco todo el año y tengo muchas variedades, incluso algunas sin azúcar, endulzadas con tagatosa, y otras que se venden mucho como las de pimentón con piña, pimentón con maracuyá o piña con mango. Esta iniciativa ha sido una gran oportunidad porque nos abre mercados que no teníamos. Ha sido una gran solución y un gran apoyo”.
La comercialización de los productos que salen de los containers se realiza en las ferias y Mercados Campesinos de Indap y en un carro tipo foodtruck que facilitó el municipio de Casablanca y que los productores llevan a distintos espacios de venta en la zona y la Región Metropolitana.
Entre los desafíos que tiene ahora el Prodesal de Casablanca está el capacitar a un mayor número de agricultores para que ocupen la sala de procesos comunitaria. Según Ariel Vilches, “la idea es que las mujeres que ya están funcionando en la Cocina capaciten a otros productores que se quieran integrar. Nuestra meta es ir aumentando en un 10% cada año el número de usuarios que estén en este nuevo circuito corto”.
El director de Indap Valparaíso, Fernando Torregrosa, visitó el proyecto y afirmó que “estamos trabajando en este tipo de iniciativas para fortalecer los emprendimientos de nuestros usuarios y mejorar su calidad de vida, disminuyendo las brechas. Aquí participan principalmente mujeres y parte de lo que nos ha mandatado el Presidente Piñera es preocuparnos y ocuparnos de potenciar el trabajo de las campesina tal como se hace acá”.