Retorno del tomate limachino antiguo no fue un capricho de la naturaleza, sino que el resultado del trabajo asociativo de los pequeños productores de la Cuenca de Limache (Mundo Agropecuario-INDAP)....
Retorno del tomate limachino antiguo no fue un capricho de la naturaleza, sino que el resultado del trabajo asociativo de los pequeños productores de la Cuenca de Limache (Mundo Agropecuario-INDAP).
Muchos lo creían desaparecido. Y no es para menos, si luego de 40 años sin que se supiera nada de él, el tomate limachino antiguo, aquel de sabor y olor inconfundibles, de forma irregular y que todavía recuerdan nuestros abuelos, ha reaparecido en gloria y majestad en el mercado. Y vaya forma de volver, ya que desde esta semana se luce en las góndolas de 15 sucursales de la cadena de supermercados Jumbo del país.
En 2018 este sabroso tomate comenzó a ser comercializado en los establecimientos de La Dehesa, Kennedy, Costanera, Los Dominicos y Portal La Reina, y ahora se sumaron Bilbao y Los Trapenses, en Santiago. También está en Antofagasta (Angamos), La Serena, Valdivia, Temuco, Puerto Montt, Valparaíso, Concón y Viña del Mar. Fue justamente en la Ciudad Jardín donde se realizó en lanzamiento oficial de la venta del resucitado fruto, en un acto que contó con la presencia de sus protagonistas: los agricultores del Programa de Desarrollo Local (Prodesal) de Olmué y Limache, además de representantes de Cencosud, INDAP y el municipio de Limache, entre otros.
El retorno del tomate limachino antiguo no fue un capricho de la naturaleza, sino que el resultado del trabajo asociativo de los pequeños productores de la Cuenca de Limache, que hoy proveedores de Jumbo -el año pasado entregaron 13 toneladas y para este año proyectan 43-, con apoyo técnico del Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA) sede La Cruz, INDAP y el equipo Prodesal de la zona.
Rescate de semillas
Maribel Sagredo, del sector Quebrada Alvarado de Olmué, es la única mujer de los seis agricultores que por ahora trabajan con la cadena de supermercados y reconoce que nunca se imaginó llegar a vender sus tomates a una empresa tan grande: “Nosotros rescatamos las semillas de las tierras de mi abuela. Empezamos a cultivar y salieron las plantas solas, porque estaban las semillas en el suelo. Luego llegó el INIA y nos aportó más variedades. Para mí es una satisfacción grande saber que hay gente que está consumiendo lo que yo produzco en forma limpia y natural. Nunca imaginé este momento”, comentó emocionada.
“Yo llevo produciendo este tomate como cuatro años, pero de joven lo hice hasta los años 80. Estoy contento por lo que está pasando, porque el tomate limachino antiguo es un bien para la comuna y para los agricultores que trabajamos en su producción. Es un orgullo que se esté vendiendo y que la gente lo conozca y aprenda a comerlo y a disfrutarlo, además que es un tomate que no necesita químicos, se come así no más y la gente no se enferma”, comentó Miguel Sánchez, del sector Los Leones de Limache.
Recuperación del fruto
La recuperación del tomate limachino antiguo fue obra de un proyecto INIA, con financiamiento de la Fundación para la Innovación Agraria (FIA) y el apoyo de INDAP y la Universidad Federico Santa María, que se ejecutó desde 2016 y en el que se embarcaron 13 productores Prodesal de Limache y Olmué.
Carolina Contardo, product manager de Cencosud, dijo que “estamos en la consolidación de este producto. Nosotros partimos esta iniciativa en 2017 en conjunto con el INIA La Cruz, que nos ayudó como entidad garante, y otras entidades gubernamentales que nos apoyaron fuertemente como INDAP y el municipio de Limache. Partimos con ciertos miedos, porque nos decían que el tomate tenía corta vida útil, pero seguimos empujando para entregarles a nuestros clientes una experiencia de compra que nos pedían. Sí fue como dijimos: tenemos que salir a buscarlo”.
La jefa de Operaciones de INDAP Valparaíso, Daniela Soto, dijo que “a través de este proyecto hoy estamos viendo a nuestros pequeños productores, usuarios del programa Prodesal, vendiendo sus tomates en un supermercado grande y no solo en este, sino que en otros Jumbo del resto de Chile. Eso va en la línea de mejorar la comercialización, pero también de volver a lo natural, la producción limpia y las tradiciones ancestrales de la zona. Este es un tremendo plus para nuestros agricultores y queremos destacar su trabajo asociativo, que es parte de los lineamientos estratégicos del Ministerio de Agricultura”.
El alcalde de Limache, Daniel Morales calificó este logro como un sueño hecho realidad: “Cuando comenzó este proyecto nadie se imaginó la envergadura que iba a tomar. Nos conformábamos con un espacio para vender el tomate en ferias locales, pero empezaron a crecer y entendieron que era una buena oportunidad de comercialización. INDAP siguió aportando con su apoyo tecnológico, financiero y de capacitación, y obviamente entre todos fuimos potenciando un producto que hoy está en distintas mesas del país”.