Es una enfermedad endémica que está presente en el país y en todo el mundo. Se trata de un virus que se encuentra en los linfonódulos, por lo tanto, hace susceptible a los animales a infecciones secundarias.
Tras adjudicarse 200 millones de pesos de FONDEF, el trabajo debiera comenzar a ejecutarse a partir de junio del presente año.
Prevenir el circovirus porcino tipo dos (PCV2), es el objetivo del proyecto que lidera el Dr. Álvaro Ruiz Garrido, profesor asociado del Departamento de Patología y Medicina Preventiva de la Facultad de Ciencias Veterinarias, de la Universidad de Concepción. “Este es un proyecto que acaba de ser adjudicado en marzo y estamos en este momento en el proceso administrativo de firma de convenios entre la Universidad y la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo(ANID), para luego de ello comenzar el trabajo a más tardar en junio”.
Se trata de un proyecto que se adjudicó 200 millones de pesos y que financiará la investigación que tiene por objetivo continuar con el desarrollo de un prototipo de vacuna contra el circovirus porcino tipo dos, agente de una enfermedad viral, no transmisible a los humanos, que afecta tanto a cerdos jóvenes como adultos, produciendo un fuerte impacto económico sobre la producción porcina.
“Es una enfermedad endémica que está presente en el país y en todo el mundo. Se trata de un virus que se encuentra en los linfonódulos, por lo tanto, hace susceptible a los animales a infecciones secundarias. Esta es una enfermedad para la cual hay que vacunar en forma obligada, existiendo 3 vacunas comerciales en el mundo de un muy alto costo y cuando comenzamos la investigación queríamos ver la posibilidad de encontrar una alternativa más económica y ver si podíamos reducir la viremia o impedirla”, explicó el Dr. Álvaro Ruiz.
El experto manifestó además que dentro de las primeras tareas a desarrollar se considera la producción de antígeno necesario que sea estable en el tiempo, “para eso hay que producir diferentes lotes y mantenerlos a refrigeración y comprobar que sigan inmunogénicamente activos, entonces la primera etapa es de laboratorio, que tiene por finalidad mejorar y estandarizar la producción de este prototipo vacunal y demostrar que es estable en el tiempo y luego empezamos con pruebas en cerdos. Este proyecto contempla cuatro ensayos diferentes en cerdos, el último, que sería a finales del segundo año, es el más grande que contempla la mayor cantidad de animales”.
La vacuna busca disminuir el impacto económico que genera esta enfermedad en todo el mundo, ya que si se deja de vacunar la enfermedad vuelve a aparecer, entonces las vacunas actuales han controlado la enfermedad, pero no la han podido erradicar, ni eliminar la viremia en forma efectiva. En este sentido el Dr. Ruiz señaló que, “tiene un impacto económico de alrededor de 10 dólares por cerdo gordo producido. En Chile, un plantel promedio en producción intensiva tiene 1000 madres, esos son 650 lechones más o menos que se producen a la semana. Las vacunas que están actualmente disponibles para esta enfermedad tienen un costo cercano a 1.5 dólares por cerdo. Este costo es superior al costo de las vacunas para otras enfermedades, el cual en general es alrededor de 1 dólar. Este mayor costo comercial de la vacuna para el control de circovirus porcino tipo dos, nos da una idea del impacto económico que puede tener”.
Finalmente, el Dr. Álvaro Ruiz manifestó que, “es importante destacar que este proyecto una vez más confirma dos cosas: el nivel de tecnología y ciencia que podemos hacer en la Facultad de Ciencias Veterinarias, y el trabajo interdisciplinario entre Facultades, ya que en este proyecto también participan profesionales de la Facultad de Ciencias Biológicas. Adicionalmente, este proyecto considera el trabajo con estudiantes de pregrado y de postgrado”.
Además, el proyecto tiene el apoyo de dos empresas asociadas; Agrícola Chillán Viejo, que es una filial del Holding Maxagro, el segundo productor cerdos del país, y la empresa Microsules, que es una empresa farmacéutica uruguaya.