La contundencia de la evidencia científica sobre los beneficios del consumo de lácteos en cada etapa del ser humano fue corroborada en el webinar “Lácteos y Nutrición”, organizado por la Federación Panamericana de la Leche (Fepale) y el Consorcio Lechero.

Ambas instituciones, a través de sus programas ¡Sí a la Leche! y Gracias a la Leche, desarrollan un trabajo amplio en la difusión del conocimiento y la ciencia láctea. Para finalizar el Mes de la Leche, realizaron este webinar, que contó con las exposiciones de Rafael Cornes, Nutricionista y líder del programa ¡Sí a la Leche! y del Dr. Rodrigo Valenzuela, director del Departamento de Nutrición de la Universidad de Chile y director científico del Comité Científico de Lácteos (Chile).

En las presentaciones, el secretario general de Fepale, Ariel Londinsky, resaltó la importancia de las campañas y trabajo que se desarrolla en distintos países para impulsar el conocimiento sobre los lácteos. En el caso de su institución, destacó que el programa ¡Sí a la Leche! contribuye a difundir los beneficios del consumo de lácteos en las personas.

El gerente del Consorcio Lechero, Octavio Oltra, apuntó a que las verdades sobre los lácteos y sus beneficios se contraponen poderosamente a mitos en circulación, sin base científica. Por eso es importante, dijo, el trabajo que se realiza en todos los países para mostrar el conocimiento sobre los aportes que hacen los lácteos en la nutrición y salud. “Tenemos claro que los consumidores cada vez se preocupan más de aspectos nutricionales de los alimentos que consumen y en forma creciente de lo sustentable que son las cadenas que los producen, por lo que es importante comunicar las enormes ventajas nutricionales de los lácteos y los grandes esfuerzos de la cadena productiva en sustentabilidad en forma abierta y permanente”.

Campañas

¡Sí a la Leche! y Gracias a la Leche son campañas hermanas, destacó el nutricionista Rafael Cornes, y destacan las características de los lácteos como alimentos saludables y sostenibles. El foco permanente es generar aprendizajes sobre sus beneficios y compartir información.

“Hoy existe mucha desinformación, es mucho más fácil poner algo en un blog”, destaca Cornes, al analizar los mensajes negativos en contra de los lácteos. “Por eso hay que difundir verdades, nos basamos en la ciencia, en la evidencia científica para evitar a un consumidor confundido. La ciencia está de nuestro lado, la información verídica está de nuestro lado”.

En su exposición informó sobre los avances logrados en la ciencia y la difusión de certezas sobre el consumo de lácteos, donde es importante ver a estos alimentos no como un aporte de nutrientes por separado, si no que en el efecto sinérgico que generan la interacción de cada uno de sus componentes. Esta es la matriz alimentaria, explicó.

“Hoy vemos qué en los lácteos, a los beneficios que ya conocíamos, se suma que toda la evidencia científica nos informa que su consumo no aumenta el riesgo cardiovascular, sí se resalta su rol protector. Y eso lo vemos en que la matriz láctea es muy beneficiosa por la suma de sus nutrientes, donde vemos que se generan péptidos que son antihipertensivos; o el efecto de la lactoferricina, que opera en contra de enfermedades e infecciones bacterianas y virales. Otros beneficios los generan los oligosacáridos, por ejemplo, que ayudan a absorber mejor el calcio lácteo”. En este punto, agregó, está el mejoramiento real de la biodisponibilidad que entregan sobre el calcio, aspecto del cual carecen las bebidas vegetales.

Rafael Cornes agregó que otros beneficios de los lácteos, por ejemplo, están en la presencia de ácidos grasos de cadena corta, que brindan energía a nivel de intestino y mejoran perfil lipídico.

“Hoy existen muchos factores que desconocemos y que quedan por estudiar. Vemos que es importante comunicar más, porque existen muchos mitos como que no se debe consumir lácteos después de los 2 años de edad o que el calcio y las propiedades nutricionales de los lácteos pueden ser reemplazados por productos de origen vegetal. Tenemos claro que no hay relación entre lácteos y enfermedades cardiovasculares, sí un efecto protector. Los lácteos son alimentos saludables y sostenibles, además que hoy todas las guías alimentarias latinoamericanas incluyen lácteos”.

Todo el ciclo vital

Consumimos leche desde hace 50.000 años antes de Cristo, aseguró el Dr. Rodrigo Valenzuela, y forma parte del consumo humano históricamente. Los beneficios en lo evolutivo, en el desarrollo neurológico e intelectual, entre otros, no tienen discusión, sostuvo.

“Tenemos certeza que una buena nutrición genera una mejor inmunidad y mayor desarrollo neurológico desde la infancia. En América Latina es una realidad el tema de la desnutrición materna e infantil, que es un problema salud pública. Junto a ello, en paralelo, crece la obesidad y sobre peso”

Hoy se recomienda el consumo de lácteos durante todo el ciclo vital de las personas, desde embarazo a personas mayores. “Vemos un impacto positivo desde el embarazo en adelante, por lo menos 2 porciones diarias, que se traducen en un mejor crecimiento fetal, menos riesgo de niños pequeños. ¿Por qué promovemos el consumo de lácteos después lactancia? Lo hacemos por los efectos positivos sobre el desarrollo, su gran aporte de nutrientes, menos riesgo de desnutrición, menos adiposidad. El consumo en niños y adolescentes genera mejor crecimiento de la masa ósea, mejor mineralización; sumemos los efectos de la vitamina A y D”.

El consumo de queso y lácteos fermentados contribuye a generar menos enfermedad cardiovascular. Los lácteos ayudan al fortalecimiento de la masa ósea, a ser un poderoso rehidratante en ejercicios y deporte, evitan la sarcopenia y la obesidad,

“Es importante resaltar el impacto positivo en la salud pública. Las guías alimentarias no los han eliminado, por el contrario, se declara a los lácteos dentro de ellas. Los programas de alimentación escolares los incluyen por sus aportes comprobados en la nutrición, salud y por mejores rendimientos. En Chile, podemos recordar experiencias exitosas como la leche Purita, que cambió la cara del país, junto con fortificar la leche con hierro, que es un vehículo para enfrentar anemia ferropriva”, comentó el Dr. Valenzuela.

Para el especialista, las nuevas Guías Alimentarias de Chile entregan un mensaje poderoso en su punto 5: “Consume lácteos en todas las etapas de la vida” y eso, aseguró, es una invitación concreta para quienes quieran mejorar sus hábitos alimenticios, que es el espíritu de este documento, concluyó.